Sea de nuestro agrado o no, los grupos de WhatsApp son cada vez más empleados. Esta popular app de mensajería, gracias a la implementación de los grupos, nos permite crear auténticas comunidades; y de esta forma, es sumamente importante el saber cómo gestionarlas. Y es que, esta acción aparentemente simple, muchas veces, puede volverse algo realmente caótico. Es por ello que, en gruposwhats-app.com/, te compartimos algunos consejos superútiles para mantener tu grupo de WhatsApp bajo control.
- Define el objetivo del grupo
Puede parecer un poco extraño, pero no todas las personas pertenecientes al grupo pueden tener claro de qué va; es decir, no diferencian su objetivo. Es ahí que debemos siempre dejar claro cuál es su finalidad.
En tanto todos conozcan su fin, mucho mejor y más fluida será la comunicación, evitando, así mismo, el molesto spam.
- Haz saber a todos el objetivo
Este punto, por supuesto, es complementario con el anterior. Después de que se defina el objetivo, no olvides hacérselo saber a todos los participantes del grupo con un mensaje en él.
- Usar el grupo para información pertinente
Idealmente, no se debería permitir que se envíen mensajes publicitarios o cualquier otro tipo de mensaje que no sean pertinente, es decir, que no tengan relación con la temática o finalidad del grupo. Y si eres el administrador o creador, recuerda “predicar con el ejemplo”. De esta forma, de manera inconsciente, estarás al resto de las personas a que respeten la finalidad del grupo.
- Coloca una foto y un nombre al grupo foto que sean identificativos
Tanto la foto como el nombre del grupo nos permitirán saber rápidamente de qué grupo se trata entre todos los chats, además de mantener aún más clara la idea de su objetivo o finalidad. Sin embargo, recuerda que tanto el nombre como la foto deben de guardar relación, de lo contrario, podría surgir confusión entre todos los miembros.
- El grupo es para temas relacionados con todos los miembros
También deberían de evitarse las conversaciones privadas entre uno y otro usuario, si bien ambos se encuentren en el grupo. Y es que el hablar de las cuestiones relacionados permitirá agilizar la comunicación, manteniéndola siempre práctica. Para temas privados, siempre será mejor enviar un mensaje privado y no involucrar a todas las personas del grupo.
- Corregir errores. Proponer soluciones
Idealmente, las normas deberían de ser vigiladas por los administradores. Así que si eres uno, no dudes en dejarlas en claro, en especial si alguien comienza a enviar mensajes que nada tienen que ver con la temática del grupo. Sin embargo, más allá de corregir errores, si consideras que algo pude mejorarse o solucionarse, también deberías levantar la voz; ya que esto contribuirá de forma positiva.
- Revisa los miembros de vez en cuando
Siempre habrá grupos con gente que termina abandonándolo y que deja de estar activa. Al revisar de manera frecuente, podrás evitar esto (eliminando a quien, por ejemplo, nunca participó ni leyó mensajes) y mantener siempre viva y activa a tu comunidad.